¿Podrías hablarnos un poco de FabLab? ¿En qué estás trabajando actualmente?
La fabricación digital es una tecnología que lo que permite fundamentalmente es construir cosas que puedes materializar físicamente pero a través de recursos digitales. Es decir, que siempre tiene que haber un proceso de creación digital al cual le sumas una serie de interfaces que permiten construir algo que al final va a ser analógico, al final algo que va a ser físico. Entonces, ese proceso de creación y fabricación digital se concentra en espacios maker o lo que se conoce como la cultura maker y uno de los espacios que forma parte de esa cultura o de ese ecosistema de construcción digital se denomina FabLab. Los FabLab son los espacios o laboratorios de fabricación digital que se generaron a partir de principios del siglo XXI y que de alguna forma forman parte de una red o una marca que se promueve a través de un laboratorio de la MIT A través de Neil Gershenfeld que lo que hace es promover esa posibilidad de que la gente pueda con los recursos de un laboratorio de estas características, poder reproducirse o construirse sus propias cosas, es decir, generar y apoyar la invención, generar y apoyar el que de alguna forma la gente se empodere a través de la tecnología y vea construido ese universo que muchas veces ha sido tan pocas veces imaginado que es el de la que tú puedas materializar tus ideas.
Y eso a través de una serie de recursos tecnológicos cada vez más accesibles. Y cuando hablamos de accesibilidad hablamos fundamentalmente del ámbito de la impresión 3D, lo que es el poder utilizar en una cortadora láser, una cortadora grabadora láser, o también el poder incluir el fresado a través de recursos extractivos que te permitan tanto construir en dos dimensiones como en tres dimensiones.
Hay varias líneas de trabajo en las que estamos en estos momentos trabajando desde el punto de vista de proyectos vinculados a proyectos europeos, estamos en dos, uno, estamos colaborando en un proyecto donde estamos dando forma a la idea de de fabricación social, que es un fenómeno que es consecuencia de de la fabricación digital y de la fabricación personal. Lo que estamos o lo que se está intentando es a través de este proyecto, es ver la forma de integrar a los ciudadanos dentro de procesos semi industriales o acercar al mundo industrial o empresarial a la posibilidad de integrar al usuario en los procesos de diseño y de desarrollo del producto. Y luego en estos momentos estamos trabajando en un proyecto, esta vez a través de una de una línea Erasmus K2 en lo que es la integración a la introducción de la tecnología, realidad virtual en los procesos de formación de la formación profesional. Es decir, de lo que es el poder recurrir a dispositivos tecnología que a veces no puedes tener dentro de los propios centros, pero que de alguna forma ese proceso lo puedes desarrollar o el aprendizaje lo puedes desarrollar a través del recurso de la realidad virtual.
¿Cómo ha ayudado la tecnología en tu trabajo? ¿Dirías que a día de hoy es esencial?
Vamos a ver, la tecnología en general yo creo que ayuda o tiene que ayudar a las personas. ¿Por qué? Pues porque evidentemente vivimos en un contexto cultural y en un contexto social en el cual la transformación digital, que lo puedes llevar tanto al terreno industrial de la industria 4.0 como al fenómeno social, es decir, que al final tú tienes la necesidad de tener una firma digital, tienes la necesidad al final de comunicarte. Y bueno, la pandemia ha despertado muchos aspectos de la tecnología importantes. Entonces, de alguna forma, la transformación digital llega a todos los niveles. ¿Qué es lo que sucede? Que hace ya muchos años ya se empieza a hablar a través de un personaje que se llama Alvin Toffler, de la idea de la personalización o de la fabricación personal o de que el usuario pueda ser partícipe de los procesos de diseño, de creación de sus propios productos o lo que se denomina, y lo conoce mucho, el mundo del marketing como prosumer, vale, entonces esto estaba anunciado en los años 70 y de alguna forma ya se ha ido materializando desde principios de este siglo. Tanto los conceptos de makers space después como la aparición de tecnologías como la impresión 3D, que es la más conocida, han iniciado un poco el proceso que anunciaba o pronosticaba Toffler. No de fabricación, en la medida de que todo lo digital va avanzando y va conquistando el mundo, ya no solamente a nivel de las redes sociales, en muchísimos aspectos el e-commerce, su relación con Internet, en los procesos, digamos de producción, de facilidad, de acceso a la tecnología, y de una relación también directa con un fenómeno social que es que cada vez más las sociedades más participativa ya se genera, digamos, una relación, un vínculo mayor con el mundo de la sociedad, pues lógicamente estas cosas van a beneficiar a la sociedad.
¿Qué opinas de cómo y en qué punto se encuentra en la actualidad el digital experience?
Yo creo que uno de los aspectos que tiene que procesar la sociedad, por un lado, es tratar de equilibrar a los nativos digitales en esas conquistas de las que hablábamos, pero también recuperando, digamos, algunos valores o aspectos que lo analógico también transmitían.
Por ejemplo, la fabricación digital es muy interesante porque relaciona ambos campos y relaciona la tecnología, que depende de una serie de recursos, de unos interfaces de la relación digital, pero también al final se construye algo que al final tiene que ser retocado, tiene que ser acabado, tiene que tener una especie de postproducción donde la intervención de la mano del hombre creo que es muy importante. Entonces, ¿qué factores intervienen? La creatividad, qué factores interviene en la variable del proceso, de la combinación entre lo manual, entre el oficio y lo tecnológico. Y estos son aspectos muy importantes porque te acerca a la persona joven, le acerca a muchas más posibilidades que simplemente lo dejáramos en lo mero digital. Uno de los problemas de lo digital es ese, como esa especie de especulación instrumental donde parece que tú le das al intro y todo tiene que salir, pues no, es imposible si no existe un criterio de especulación intelectual detrás de todo el proceso, no hay forma de resolver nada.
¿Qué opinas de las exposiciones de arte y diseño en el metaverso? ¿Lo ves como una herramienta o como un obstáculo?
Yo no soy un experto del metaverso todavía, pero sí que le veo bastante futuro a esto. Tal como lo están sugiriendo, y tal como tenemos a determinados tipos de personas que tienen unos grandes poderes tecnológicos que invierten o piensan que cuando el señor Zuckerberg lógicamente está metido en este tema, es porque de alguna forma hay algo de negocio en este tema y porque nos anuncia una nueva forma de ver lo digital o lo virtual en este asunto. A mí me produce gran interés y me llama mucho la atención ver como hay mucha gente en el mundo del arte, sobre todo jóvenes artistas que están ya empezando a desarrollar proyectos en el ámbito de lo que son los NFT, que es una parte que igual que el blockchain u otro tipo de cosas que están relacionadas con el tema del metaverso y que están produciendo una transformación en muy poco tiempo y donde se está moviendo mucho dinero. Entonces, pues yo qué sé, siempre me gusta estar a la expectativa, digamos de estas transformaciones que no me preocupan tanto en la medida que son muy rápidas, porque lógicamente, si la tecnología aparece y tiene que ponerse en marcha, antes la tecnología en los años 60 podía costar diez años a que se pudiera poner en marcha. Hoy en día estamos hablando de meses para que se pueda poner esa realidad en el mercado. Yo creo que el Metaverso está pensado precisamente en un acercamiento al mercado más rápido de lo que nuestras cabezas están acostumbradas. Posiblemente haya burbujas? si yo no niego que vaya a haber burbujas, porque ya desde el año 2008 ya estamos viviendo muchas burbujas, pero también estamos asistiendo a un cambio donde lo digital parece que vaya a sustituir a lo analógico, pero yo creo que va a convivir siempre, convivir como personas, siempre estamos llamados a vivir la parte de los sentidos y las experiencias de los sentidos. Si tú tienes que comer algo que te genera sabores y que genera una serie de experiencias que tú vas a tener, lo digital va a formar parte de ese sentido de necesidades que tiene la sociedad. No me preocupa a mi si lo digital va a sustituir o no, va a formar parte si tú quieres aprovechar un nuevo nicho de mercado donde antes esto no lo tenía.
¿Como piensas que esto podría ayudar al artista?
Es también una herramienta de oportunidades, es decir que yo pueda estar viendo jóvenes que les cuesta muchísimo vivir del arte, no poder comer y que de repente ven ahí que se les abre un mundo pues oye, a mí me parece bienvenido sea, vamos a ver qué experiencias vamos a sacar de ahí. Lógicamente lo que tiene que haber es un pensamiento crítico social que pueda decir oye esto, ¿Qué sucede? ¿Por qué suceden las cosas? qué es lo que pasa? ¿Qué beneficios tenemos de esto? Qué malo tenemos de esto? Claro si seguimos siendo una sociedad que no se enfrenta críticamente a todas las situaciones que aparecen pues nos asustará muchísimo, nos quedaremos así con los ojos así en grande, habrá personas que no están acostumbrados a lo digital que dirán que aquí Qué pasa?
Jóvenes que no se sabrán si meterse o no meterse Bueno pues pongamos un poco las bases, pero dejemos experimentar y crear a la gente alrededor de esto. Hay obras digitales en esos momentos de millón y medio de euros de gente que ni se lo esperaba eso cobrar en toda su vida pero que es real, claro en un pensamiento que te anquilosas que te quedas simplemente en tus aplicaciones de Smartphone de hace 10 años pues dirás esto cómo puede ser pues bueno estas cosas suceden y más que tienen que suceder.
¿Podrías darnos alguna pista de cómo enfocar las nuevas experiencias tecnológicas en este proceso de relación cliente-producto para que sean memorables y únicas?
Yo creo que lo que tiene que hacer nuestra sociedad en general es arriesgarse un poquito más, si te hablo desde un punto de vista científico me voy al pensamiento científico es decir la forma en que Einstein o cualquier investigador ha llegado a descubrir grandes cosas ha sido metiendo la pata, entonces hay mucho miedo a meter la pata somos una sociedad, te hablo de mis alumnos como te puede hablar de lo que conozco del mundo de la empresa etcétera que le cuesta pensar que tiene que meter la pata. Por qué? Pues porque nos hace perder mucho el tiempo eso, que no merece la pena, que va a decir alguien de mí si meto la pata, que van a pensar de mí, pero yo creo que es interesantísimo pensar que hay que meter la pata, meter la pata hace crecer exponencialmente a la gente, esto es para mí un punto de partida como muy interesante, tener ese pensamiento de no tener miedo es decir, de tratar de experimentar más. Experimentar nos lleva a encontrar nichos y huecos donde otros
en otro sitio no lo encuentran y eso forma parte del pensamiento científico y el pensamiento científico es prueba, ensayo, error, prueba ensayo error, hasta que lo consigues. De eso muchas veces se habla en el mundo del emprendimiento de las start up y la gente no se da cuenta y realmente eso es una experiencia por la que tienes que pasar lo que pasa es que muchas veces parece como crees que tienes la idea genial y sobre la idea genial Te tiras tres años y luego no funciona tu negocio y quedas con una frustración que te cagas. Lo que hay que esperar es que la gente no acabe con esa frustraciones sobre el tema de las tecnologías, hay que formar en habilidades, uno tiene que conocer unos programas otros ,etcétera etcétera Pero no pasa solo por la especialización, pasa sobre lo que podemos hacer con esa tecnología o sea es antes es más importante lo que podemos hacer que lo que se puede hacer. Yo creo que ahí está un poco digamos la ventaja, al final va a haber sociedades a un nivel digamos un poco más mega, va a haber sociedades donde han potenciado más esas posibilidades y han encontrado solución porque han dedicado tiempo y han perdido, que no es perder el tiempo, en probarlo y experimentarlo que aquellos que no, y al final eso es una inversión, muy bien, no es un gasto es una inversión.
